El título original del libro es "Mindless Eating: Why we eat more than we think" del autor Brian Wansink. Advance Translations ha elegido este libro para comentar por qué nos ofrece una información muy valiosa en cuanto a la psicología de la alimentación, cosa que nos preocupa a muchos. En él, este profesor y psicólogo de nutrición, nos explica sólo algunas de las múltiples pruebas que ha realizado con personas para demostrar que hay muchos factores que influyen en la cantidad de comida que ingerimos. Muchos de los cuales no somos conscientes. Los factores, en general se encuentran a nuestro alrededor, y la industria de alimentación los conoce y los utiliza a su favor. Por ejemplo:
- Muchas veces creemos que comemos hasta que "estamos llenos". Pero, ¿cuándo estamos llenos? Parece ser que nuestro estómago no sabe cuánto hemos comido y no es un fiel indicador de si estamos "llenos". En un experimento en el que amañó un plato de sopa para que siempre estuviera "lleno" para algunos comensales y sólo el plato en sí para otros. Se demostró que cuando el plato se llenaba automáticamente sin que la persona se diera cuenta comían hasta tres veces más que el otro comensal que sólo comía un plato. Luego nuestro "estómago" no es el mejor indicador de cuándo parar.
- El tamaño importa. El tamaño de nuestros vasos, platos y cubiertos influye mucho en la cantidad que comemos. En una prueba que realizan ven que si dan a unas personas vasos altos y otros vasos anchos (con la misma capacidad) los que tienen los vasos anchos beberán una media de 74% más que aquello que tengan un vaso alto.
- Comer acompañado también nos hace perder la noción de lo que hemos comido porque estamos inmersos en la conversación y el ambiente. Comemos durante más tiempo que cuando comemos solos. Wansink dice "Comer es como ir de compras: cuanto más tiempo permanezcas en el centro comercial, más compras." Lo mismo ocurre con el tiempo que estamos en la mesa. Según sus estudios, en general se come un 35% más cuando se come con otras personas.

Wansink ofrece un gran número de ejemplos y estudios divertidos que ha realizado. Es muy importante conocer estos factores para poder utilizarlos a nuestro favor. Es decir, para controlar lo que ingerimos, y no que nos controlen. Elegir el qué y cuánto comemos de forma consciente y cuidadosa. Además según Wansink, la única dieta que funciona es aquella en la que consigamos comer menos, y de todo. Aprovechando estos trucos, seremos capaces de comer un poco menos de manera que no pasemos mucha hambre, y por lo tanto perderemos peso de forma paulatina pero duradera. Como dirían los ingleses "Food for thought".